Lo más divertido de mi trabajo es tener mis «citas a ciegas» con clientas. Por supuesto ellas me conocen, han visto mis publicaciones y saben con quién hablarán, pero para mí es el inicio de un camino totalmente nuevo, donde el asesoramiento será el mapa que trace el paso a paso de una serie de conversaciones donde en cambio ellas no saben qué esperar.
Honestamente creo que cuando se contrata un servicio online (el que fuera), el mayor de los temores es no tener una idea real de con quién se va a trabajar, y creo que más allá de la emoción de arrancar a conocer un montón de información que les ayudará, lo que más las intriga es cómo será la persona que las acompañará en las sesiones. Así que quiero contar cómo es el proceso de una sesión para despejar dudas, en caso de que estés decidida a tomar alguna muy pronto.
Preparación para un Asesoramiento
Tienes que saber que si estás contratando un servicio de estos, es porque tienes la mejor disponibilidad de aprender y escuchar sugerencia así como también información clave que quizás desconocías de ti misma a nivel silueta, colores, estilos, forma de rostro, etc, con lo cual lo mejor es que no te abrumes leyendo de todo para indagarlo por ti misma. ¿Por qué? Es mejor cuando aprendemos desde cero, que luego derrumbar creencias o cosas que hemos leído sin una guía certera.
Probablemente tu asesora te pida que vayas (o te conectes) a cara lavada, así como también con prendas relajadas que permitan ver la forma de tu silueta. Ejemplo: una calza y camiseta, un joggin y top, etc. Es normal, porque hay que analizar silueta y forma de rostro, así que mientras estés más natural, mucho mejor.
Sesión de Asesoramiento
El día llegó y al fin sabrás de una vez por todas qué tipo de silueta tienes, cómo harán para descubrir tu estilo, etc. Básicamente lo mejor sería que tu asesora tenga una entrevista o cuestionario para que respondas en esa primera cita, y luego de un rato ella empiece a decirte la interpretación de tu estilo.
Por ejemplo, con mis clientas llenamos lo que llamo «ficha técnica de estilo», que tiene un par de hojas con preguntas muy casuales hasta llegar a lo más específico que es su armario, la forma de comprar, y por supuesto conocer sus objetivos con el servicio.
Esto le da la pauta a ella, de que mi interés es ayudarla y no imponerle nada de lo que vayamos a trabajar con su imagen. Pero claro, cada asesor tiene su método.
La mejor forma de aprovechar tu sesión de asesoramiento es tener en claro qué quieres lograr con ello, es decir, explicarle a tu asesor qué necesitas, que puede ser desde definir estilo para elegir prendas, aprender a comprar, ayudarte en una transición que estás teniendo con tu imagen, inyectar más confianza en tu vestir, y muchos otros temas más con los cuales puede ayudarte un profesional de la imagen.
Tiempo de un Asesoramiento
Usualmente existen servicios que consisten en una sesión y listo, de ahí sacan muchas respuestas y ayudan a su cliente a encontrar lo que buscaban (yo también ofrezco esa opción con la Sesión Express), pero no siempre es la mejor manera de ver un resultado a largo plazo. Y entiéndase que mucho tiene que ver con lo que un persona quiere lograr a través del servicio.
Te invito a reflexionar en lo siguiente… Si llevas X cantidad de años comprando, vistiendo y viéndote de una manera, ¿cómo crees que eso puede cambiarse en una sola sesión? Si bien sirve para empezar a impulsarte a generar cambios, lo mejor es estar consciente que para lograr algo diferente, hace falta tiempo e inversión, y ahí es cuando podrás encontrar alternativas de servicios con más número de sesiones. Eso sí, cerciórate de saber exactamente qué harás en cada una de estas para que sientas que estás invirtiendo en algo que vale la pena y tiene una meta a cumplir para ti.
Luego de una Sesión de Asesoramiento
Las sensaciones pueden tornarse un tanto confusas, entre alivio y ahora ansiedad por tener toda esa información lista para ser aplicada, pero lo cierto es que el trabajo verdadero inicia a partir del momento en que terminas la sesión con tu asesor/a y tienes que ir a tu armario, o a esa tienda y enfrentar el cómo te ves, cómo te sientes y qué harás al respecto.
¿Lo mejor?
Consultar por un servicio completo, uno donde te sientas contenida, donde no sea solamente hablar de ropa y accesorios, sino que te sientas acompañada en un montón de dudas que puedan surgirte con tu forma de verte, tu ropa y hasta la seguridad que sientes (o no) con tu cuerpo. Recuerda sobre todo validar ese interés que tienes por descubrirte a ti misma, y en pos de eso tomar las mejores decisiones para saber quién será quien camine contigo en este proceso.
Si quieres hacerlo conmigo, te invito a llenar el formulario donde puedo analizar lo que estás necesitando, y así solicitar uno de mis servicios.
¿Qué esperar?
Hay que HACER, más que esperar, pero aún así hace unas semanas armé una nota al respecto y sobre el tema de en cuánto tiempo veremos cambios luego de un servicio, así que te invito también a revisarla.
